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jueves, 12 de febrero de 2015

LAS CARPAS Y SUS INSTINTOS: DONDE BUSCARLAS Y ENCONTRARLAS.


 LAS CARPAS Y SUS INSTINTOS: DONDE BUSCARLAS Y ENCONTRARLAS.

 MOSTABAITS, LOS BOILIES QUE NO SE ATREVEN A HACER OTRAS MARCAS.  
Todos nosotros, a la hora de buscar un puesto de pesca pensamos en: un lugar cómodo, que sea accesible, que pueda llegar a la orilla con el coche, lo mas oculto posible si tenemos que pasar noche etc...

Nunca nos planteamos cual es o cuales son los mejores sitios para las carpas, buscamos el puesto ideal para el pescador, y esperamos que las carpas acudan, por el solo echo de lanzarles regularmente una cantidad de cebado que estimamos oportuno, ¿no seria mejor ganar tiempo y ahorrar en cebado intentando localizar los lugares mas frecuentados para las carpas?



En el presente articulo intentaremos localizar estos lugares querenciosos dando datos precisos y totalmente fiables.

Si pensáramos como las carpas, las encontraríamos fácilmente, pero pensamos como humanos y nos movemos por nuestros propios instintos, cambiemos nuestros “chips” y pensemos como ellas, analicemos sus instintos, y  daremos con facilidad con los mejores lugares de pesca.

Los peces se mueven por sus propios instintos, pero existen variables que pueden jugar a nuestro favor o al contrario. Estos factores que hacen que las carpas residan en un lugar concreto o desaparezcan de ellos son las siguientes: temperatura del agua, clima, luminosidad, vegetación, disponibilidad de alimento, estación del año, instinto de reproducción y supervivencia, y por ultimo, composición del fondo. Todos estos factores están estrechamente relacionados entre sí, y pasaremos a comentar los mas importantes.


Zonas frecuentadas por pescadores.

El mejor de los lugares donde podemos localizar las carpas es el mas frecuentado por la mayoría de los pescadores de un pantano, charca o río, pero también es el mas difícil de obtener buenas capturas, por la desconfianza con la que se mueven los peces por estos lugares. Es relativamente fácil obtener capturas, pero nuestro fin es buscar las mas grandes y a estas, su instinto le dice que hay peligro en estas zonas y no será fácil engañarlas.


Luz solar.

La luz solar es el motor que mueve la vida, es lógico pensar que hasta donde llegue esta,  se localizará la mayor concentración de alimentos, tanto vegetales como animales, por lo cual es absurdo forzar a alimentarse a las carpas en lugares muy profundos, privados de luz solar. La penetración de la luz en el agua dependerá de la claridad del agua.


Zonas de rocas.

Estas son refugio y cobijo natural de cangrejos, insectos, ninfas y mini tallas, es lógico pensar que este lugar sea frecuentado por las carpas a la hora de tomar alimento.



Las ultimas sequías nos regalan vistas como estas..

Orillas con vegetación abundante.

Las plantas ribereñas como cañas, juncos, eneas, espadañas... son el hogar de miles de insectos, que con frecuencia caen al agua y sirven de alimento a las carpas, estas zonas son unas despensas inagotables durante la primavera y verano.


Zonas habitadas por otras especies.

Si paseando por la orilla del pantano en busca de nuestro puesto de pesca, observamos abundantes excrementos de aves como espátulas, garzas, patos etc... y palomitas tomando sales minerales de un suelo plagado de insectos, sobre todo voladores, se observan también en la orilla los huecos típicos del hociqueo de las carpas al alimentarse, hemos encontrado una zona potencialmente muy buena para pescar, aparentemente para nosotros no existe diferencia alguna entre ese lugar u otro, pero si para los insectos, las aves y, como no, para los peces. No hay que ser muy astuto, que condiciones tan favorables, puedan cumplirse también bajo el agua y que muchas carpas habiten este hermoso paraíso.


ZONAS DE FANGO
 Picos de reculas.

Aunque no sean lugares de permanencia y de alimentación, si son lugares de obligado paso en el deambular de las carpas al trasladarse de recula en recula, si ofrecemos comida en estas zonas, a bien seguro que se toparan con ella tarde o temprano.




Altos sumergidos.

Estos lugares cumplen una serie de requisitos óptimos para tener garantizada una buena jornada de pesca:

  1. La menor profundidad hace que llegue con facilidad la luz solar, que traducido a idioma carpero, significa alimento.
  2. Reúne casi las mismas condiciones de la orilla donde suelen alimentarse de forma natural las carpas.
  3. Es un lugar tranquilo, no perturbado por la presencia humana, tan solo ocasionalmente quebrantada por barcas destinadas al bass.
  4. Las carpas toman alimento en estos lugares de forma confiada y tranquila

Si tememos la suerte de disponer de una barca con sonda y descubrimos un lugar con estas características, sería conveniente reservarlo para nosotros mismos


Zonas de cambios bruscos de profundidad.

Son zonas con una meseta cercana a la orilla que después cae empicado a un desnivel de varios metros, estos sitios son muy cómodos para las carpas, ya que disponen de alimentación cercana a su zona de descanso.


Vegetación y obstáculos sumergidos.

Son refugios naturales de las carpas, aquí se sienten seguras y protegidas. No voy a decir que pescar en estos lugares sea cosa fácil, ya que pondremos nuestros equipos al limite de su resistencia, pero pescar en las proximidades de obstáculos es realmente efectivo.


Cortados y acantilados.

Estos lugares son prácticamente inaccesibles, pero siempre son frecuentados por carpas, en las épocas del año que mas productividad tienen. Los acantilados y cortados están habitados por pájaros y anidan en ellos, las carpas estarán expectantes para sacar su propia tajada , la caída de crías, y las propias heces de aves. Aunque os parezca absurdo, he visto en muchas ocasiones a las carpas alimentándose de las heces de golondrinas bajo los puentes, y hablando de puentes, ¿no os parece que tiene una cierta similitud con lo que se está hablando?


Presencia de alevines.

Si observamos cardúmenes de alevines desplazándose siempre por una misma zona o recula, estamos de suerte. Todos sabemos que el pez grande se come al chico, esta ley de la naturaleza, no es solo de obligado cumplimiento de los depredadores, una carpa de unos 6 kilos en adelante, ya ha aprendido de los beneficios proteicos que le supone la depredación, está comprobado que no solo los barbos son capaces de tomar un pequeño pez muerto. Por todo ello, un lugar con presencia de alevines, es un lugar donde las carpas mas grandes estarán esperando su oportunidad.


Viento.

La presencia de viento, es un factor determinante a la hora de elegir el puesto, debemos siempre ponernos cara al viento. Un suave viento del sur de cara durante la primavera, verano e iniciado el otoño, cumple varios factores beneficiosos.

  1. Oxigena el agua, sobre todo en verano.
  2. Remueve los fondos fangosos de las orillas, preparando el terreno para la búsqueda de larvas del fondo.
  3. Todos los insectos y semillas que caigan al agua serán arrastrados inevitablemente a la orilla expuesta al viento.

Estos factores hacen que las carpas se dirijan a esta orilla.


Observación.

El observar zonas frecuentadas por las carpas no es tarea difícil, solo debemos seguir una pautas:

  1. Dispondremos de lápiz y papel para anotar. Buscaremos un lugar elevado, haremos a mano alzada un mapa del lugar y observaremos los saltos y los indicios de presencia de carpas, las mejores horas para observar son el amanecer y el ocaso. Pondremos marcas en nuestro mapa de los saltos y movimientos en el agua y el lugar aproximado, así como la frecuencia con la que se realizan.
  2. Avistar carpas. Ver carpas no implica ver una buena zona de pesca. A menudo las podremos ver paseando, tomando el sol, en superficie, descansando etc... estas carpas no tienen en “mente” la mas mínima intención de alimentarse, buscamos carpas en posición de tomar alimento, es decir aleta caudal fuera del agua, cabeza en fondo y mucho polvo o lodo levantado por la acción de comer, todo esto delata infaliblemente que se están alimentando.
  3. Burbujas. La presencia abundante de burbujas, sobre todo, paralelas a la orilla, a una determinada distancia y repartidas de forma irregular, en cuanto a tamaño y frecuencia, es un indicativo de lugar donde se alimentan de forma natural las carpas. Una forma artificial de hacer esto mismo, es engodar un poco y esperar en la superficie los resultados, eso si, siempre que sean en fondos con fangos, ya que estas burbujas son de metano y este se produce de forma natural por la descomposición de materia orgánica y al mover el fondo las carpas alimentándose, sube hasta la superficie.



Cauce de un antiguo río sumergido.

Dependiendo a la profundidad a la que se encuentre, servirá de lugar de descanso o de paso obligado para trasladarse de un lugar a otro. Si nos encontramos ante este segundo caso, es un buen lugar para tentarlo.

Normalmente los cauces de río sumergidos suelen coincidir con las zonas mas profundas de un determinado lugar del pantano, por simple deducción, los alimentos suspendidos trasladados por el agua y en movimiento, debido a la gravedad, terminaran depositándose en este lugar, por lo cual lo convierte en una zona muy activa. Lo mismo ocurre con los arroyos que forman reculas. De la misma forma que se depositan los alimentos también se depositarán materias vegetales y organismos sin vida, sobre todo peces, etc... y esto da lugar a una alta concertación de alimento para invertebrados, larvas, anélidos etc... que a su vez, son un bocado exquisito para las carpas, en definitiva, estos lugares son zonas obligadas de hacer un puesto.


Desembocaduras de ríos y arroyos.

Todas las aportaciones de agua, también conlleva un aporte de alimento, la pesca está garantizada, pero dependiendo del embalse, puede llegar a ser una verdadera tortura pescar en estos lugares, por el incordio de falsas picadas de peces de talla pequeña y mediana.


Islas.

El perímetro de toda la orilla de una isla, es uno de los mejores lugares de pesca, si podemos acceder a ellas con nuestros montajes, estaremos apostando sobre seguro, estos lugares son auténticos hoteles de 5 estrellas para nuestras carpas, aislados y fuera de todo peligro.


Reproducción.

Es el instinto mas importante en la naturaleza animal, por encima, en algunos casos del supervivencia y de alimentación. Si tenemos la suerte de poder estar en una sesión de pesca a los días previos o posteriores en el lugar oportuno, será uno de los momentos inolvidables de pesca. Debemos buscar playas o colas del pantano someras, con poca profundidad, llenas de vegetación acuática o de orilla, son en estos lugares donde se darán cita las carpas antes del desove, comiendo todo lo que les pongamos por delante, para poder afrontar el desgaste que les produce el desove, y si hemos llegado en los días posteriores, no importa, también se alimentarán de forma avarienta para reponer fuerzas. Si tenemos la mala fortuna de pescar durante el desove, mejor quedarnos a ver el espectáculo, por que lo que es comer..., no es precisamente en lo que están ocupando su tiempo. Es tan fuerte el instinto de reproducción que dejaran toda actividad, incluida la alimentación, para dedicarse de lleno a las tareas amorosas.


Factores climáticos.

Según las estaciones del año y como se presenten los días, podremos dar unas normas generales, auque este tema ya ha sido tratado en artículos anteriores (véase el nº 117 Estaciones de la carpa), donde se explica el comportamiento y por consiguiente donde buscarlas.

Los factores que corren en contra de la pesca climáticos son dos fundamentalmente, uno de ellos se da en todas las épocas del año, y es la variación repentina del barómetro y cambio brusco de temperatura o tiempo atmosférico, estos cambios repentinos son captados por las carpas mucho antes que el barómetro, pudiéndose tornar una buena jornada de pesca en cuestión de horas, en una autentica tortura. El otro fenómeno que hace retirarse a las carpas es el frío viento del norte, ligado con una bajada de temperatura, esta combinación de estos dos factores hace que me plantee un día hogareño.

Por lo demás, tiempo estable durante algunos días seguidos, no hacen presagiar nada malo en nuestro deporte, incluso en invierno.

Después de una tormenta en verano, seguida de viento, hace que las carpas se activen, y pueda salvar una tarde aburrida y calurosa de pesca, en una tarde fresca y con sonidos de alarmas. Lo mejor para esta época veraniega son las noches, ya que el ambiente refresca el agua.


Temperatura del agua.

Aunque dependiendo de la zona de la península donde nos encontremos, esta temperatura puede variar algunos grados, pero como norma general, una temperatura por encima de los 10  y hasta los 18 ºC son temperaturas ideales, por debajo o por encima de estos márgenes, hace que las carpa se refugien en sus lugares mas profundos a descansar buscando temperaturas mas benignas.


Mapas.

Si disponemos de mapas, y en especial los topográficos, del lugar donde vamos a pescar, nos servirán de gran ayuda, en ellos podemos apreciar sin sondear, los cambios bruscos de profundidades, las terrazas o altos sumergidos, las playas someras, etc.... En verdad son un verdadero alivio, también podemos ver en algunas web estos mapas, que cumplen muy bien con su cometido, no nos ponen las profundidades , pero seguro que podremos encontrar accesos escondidos y lugares donde se estrecha el pantano, que son de obligado paso de carpas para trasladarse de un lugar a otro.


Territorio.

Aunque no es una ley científica, estoy dispuesto a compartir una teoría que creo que es mas que fiable, y contesta a la siguiente pregunta: ¿tienen las carpas territorios preferidos, o propios, o deambulan siempre por los mismo lugares...? Yo me atrevería a afirmar que si, demasiada son las “casualidades” que se cumplen por toda España, de los mismos ejemplares pescados en los mismos puestos de pesca, como para desmentir esta afirmación con rotundidad. Estas carpas son pescadas una y otra vez, en mi caso hasta 3 veces, por los mismos pescadores, los mismos puestos y cebos iguales o diferentes, así que, aparte de rigor científico, me atrevería a decir que las carpas tienen su propio territorio, o su zona preferida, etc... Si pescáis en una zona donde obtuvisteis buenos resultados, podéis seguir intentándolo a intervalos de tiempo, no demasiado regulares, y os podréis llevar una grata sorpresa.


Los bares.

Alguno pensará, ¡que tiene que ver el buscar carpas con los bares!, pues os puedo asegurar que encontrando el bar donde se reúnen los pescadores de competición o grupos de pescadores aficionados, encontrareis también a las carpas, ¿cómo? Solo tienes que dejar caer en un tono de voz algo elevado alguna pregunta referente a la pesca de carpas y seguramente se te agolparan para contarte mas de una historia ocurrida en ese lugar. Te informaran de lugares, cebos, técnicas, si  saben que son las boilies etc... la mayoría de las veces podemos recopilar mas información en un bar que en una enciclopedia o libro de pesca.


Ya solo me queda animaros a recopilar información, observar lugares , profundidades etc... es la mejor manera de aprovechar el tiempo y no confiar que las carpas estarán, donde nosotros queremos y comerán lo que les pongamos, por el solo echo de cebar un lugar cómodo y elegido a nuestro gusto. Solo de esta forma ahorraremos mucho tiempo y cebado, el localizar las zonas calientes de cada embalse, es la mejor de todas las tácticas de pesca posibles.


 MOSTACHON

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