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viernes, 15 de diciembre de 2017

HABITO ANIMAL EN LA CARPA.

LOS BOILES QUE VALEN MÁS DE LO QUE CUESTAN?


HÁBITO ANIMAL EN LA CARPA.
Los animales, en cuanto a sus costumbres y hábitos, se pueden clasificar en diurnos, crepusculares y nocturnos, según su mayor actividad se desarrolla durante el día, el amanecer y anochecer o nocturnos.
Esto ya nos aclara muchísimo, aún así no puede limitarse toda la actividad animal en una sola de estas clasificaciones, todos hemos visto alguna vez un búho en pleno día o un palomo volando en plena noche, estos casos son excepcionales y no encuadran cuando tiene lugar la mayor actividad del animal.

Como sabéis la carpa es crepuscular, es decir, como se ha explicado anteriormente, su mayor actividad se desarrolla durante las horas que coinciden con el antes y después del amanecer y anochecer. Esto no quiere decir que podamos ver carpas a pleno día alimentándose o escuchar saltos por la noche, estos últimos son más evidentes a esas horas por estar todo completamente en silencio y nuestros sentidos más agudos pendientes de cualquier ruido o circunstancias anormales. Dicho esto se puede afirmar que las mejores horas de pesca son las que sabemos todos, amanecer y anochecer.
Al cambiar las horas del crepúsculo igualmente van cambiando los hábitos, cuando los días se acortan y las noches son mucho más largas, por pura lógica es más fácil tener una picada durante la noche que durante el día, aún así hay muchísimos más factores que inciden directamente sobre la actividad de los peces.
FACTORES QUE PUEDEN INCIDIR EN LA ACTIVIDAD DE LOS ANIMALES Y PECES.
Todos los animales se mueven por instintos, estos son básicamente  relación, nutrición y reproducción. Si nos dejamos guiar solo por estos instintos pensaremos como animales, pero el ser humano es social y nos impide pensar como ellos.

Cuando un animal se relaciona con su medio lo más importante es sobrevivir un día más, la naturaleza es cruel, siempre hay peligro por todos lados, por consiguiente lo más probable es encontrar lugares donde estar lo más seguro posible durante las horas de menos actividad y poder descansar hasta no tener más remedio que desplazarse por algún motivo.

Los lugares de refugio son los mejores y más productivos en cuanto a pesca y picadas, los peces tienen que desplazarse cero para conseguir alimento o muy poco del lugar donde para colmo se encuentran seguros. Lugares tranquilos lejos de la presión de pesca, sitios con muchos obstáculos, cortados profundos cercanos a playas de grava, etc. Estos son lugares ideales para tentar a nuestras carpas, aunque si pescamos entre obstáculos indudablemente el número de picadas será siempre muy superior al de fotos con capturas.

Las temperatura del agua influye muchísimo, mientras en los embalses del bajo Guadalquivir una temperatura muy elevada,  y cuando digo muy elevada es que notas el agua muy caliente si te bañas, no importa tanto como en la cuenca del Guadiana o la del Tajo, en estos lugares al llegar el verano y tener varios días y noches tórridos de calor y calentar algo más de la cuenta el agua, las carpas se desplazarán a zonas más frescas. Por otro lado la temperatura interviene en los hábitos de los peces pues cambia su actividad, aguas más cálidas mayor actividad, aguas muy frías actividad casi nula. En aguas muy calientes la actividad nocturna es muy superior a la diurna por la ausencia del sol y la incomodidad que le ocasiona a los animales.

Presencia de alimento. El instinto de nutrición no debe ser pasado por alto, encontrar un lugar repleto de comida y poder disfrutar del banquete se les hace irresistible. Así que esto cambia o puede hacer cambiar la actividad y los hábitos de los peces en determinados momentos puntuales durante un tiempo concreto.

Estaciones del año, de la reproducción hablaremos después pero el otoño y la primavera afectan a su comportamiento ya que deben alimentarse más, todos los animales notan las bajadas de temperatura diurnas y nocturnas, notan los cambios en las horas de luz de los días, etc. Al llegar el otoño muchos animales hacen acopio de alimento o se atiborran de ellos para conseguir reservas en forma de grasas, este acopio de alimento o grasas es lo que marcará la diferencia entre la vida y la muerte durante la escasez de alimento durante la peor época del año, que no es otra que el invierno.

Los cambios bruscos de presión en invierno no es que puedan afectar es que afectan, lo mejor es ir a pescar días nublados sin lluvia que días despejados con heladas al amanecer y temperaturas agradables al medio día, y digo sin lluvia por pura comodidad.

Las épocas reproductivas cambian mucho los hábitos de los peces necesitan las hembras muchísima energía para producir huevas y los machos igual para someter a las hembras y perseguirlas y luchar con los otros machos para conseguir la puesta y fecundar las huevas. La mayor actividad de producen días antes, durante y días posteriores al deshove hasta conseguir recuperarse.

Otra de las cosas que puede cambiar un hábito de un pez es cuando se encuentra sometido ante un estímulo, ya hemos visto algunos estímulos externos pero también pueden recibir estímulos que son detectados por los órganos de los sentidos de los peces, como es el tipo de alimento, su olor, información recibida por la línea lateral, etc. Un pez que simplemente se esté soleando o paseando al recibir un fuerte estímulo de algunos de los órganos de sus sentidos, puede hacerlo cambiar de conducta e incrementar su instinto alimenticio para sentir la necesidad de comer, por eso es tan importante cuestiones como el olor, o sustancias químicas que desprenden sus alimentos habituales que casi obligan al pez a sentir la necesidad imperiosa de alimentarse.

OTRAS REFLEXIONES.
Mucho se ha hablado de la carpa, costumbres, hábitos, forma de alimentarse, etc. Pero, en realidad, la mayoría de estos artículos están basados en la observación y no en estudios científicos verdaderos.
Lo que percibimos es lo que damos como cierto y la mayoría de las veces generalizamos pequeñas conclusiones llevándolas a convertir en teorías y de tanto repetirla en ley, un ejemplo, dos colegas pescan, tienen una picad a el cebo X a las 16 horas, cuando cuentan a otro su jornada dice, allí pican mucho a tal cebo y a esta hora, luego de repetir sus hazañas varias veces se convierte en SOLO PICAN AL VEBO TAL Y A TAL HORA. Puedo y podemos escribir miles de frases o artículos, pero muchas veces no son fiables ya que las conclusiones están basadas en la observación y no son
científicas, para ello deberíamos de poner cientos o miles de dispositivos a carpas y ver cuantas horas tienen de actividad al día, cuántas de ellas están dedicadas a la alimentación, cuantas al descanso, donde descansan, lugares donde se alimentan o frecuentan, profundidad media, o profundidad según la temperatura del agua o la estación del año, etc. Por eso es muy difícil dar con la madre del cordero con tan solo observar cuando prácticamente el 100% del tiempo de las carpas se nos oculta a los ojos y verdaderamente podríamos hablar de LA VIDA OCULTA DE LA CARPA. CONCLUSIONES MUCHAS, PERO….. BASADAS EN QUÉ??????

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